La cultura aporta identidad, vida, conocimientos, emociones, unión, experiencias intelectuales, seguridad, diversidad, enriquece la base de la sociedad y, además de proporcionar numerosos beneficios sociales, también contribuye al desarrollo económico de un país.
Según un estudio realizado por la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología y publicado en Journal of Epidemiology and Community Health, acudir al teatro, visitar galerías, museos, asistir a conciertos… mejora la salud. El encargado de dirigir la investigación, Koenraad Cuypers, asegura que “la frecuencia de la participación cultural y el número de diversas actividades están positivamente asociadas a una buena salud, una buena satisfacción con la vida, un menor nivel de ansiedad y un menor nivel de depresión”.
Debido a la pandemia provocada por la Covid-19 todos los espacios culturales apagaron las luces y cerraron sus puertas. Pero el talento y la ingeniosidad de infinidad de artistas no cesó y crearon eventos virtuales para acompañarnos y facilitarnos los días de aislamiento, ¿cómo hubiese sido el confinamiento sin conciertos en directo, sin la oportunidad de ver obras de teatro online, sin visitas guiadas por museos, sin escuchar recitales de poesía…? En definitiva, ¿cómo hubiese sido el confinamiento sin cultura? ¿Qué haríamos sin los artistas y sin todo el equipo que sustenta la cultura?
El sector cultural ha sido uno de los más golpeados por la crisis económica actual y durante los primeros meses de pandemia, la posición del Ministerio de Cultura fue muy criticada, ya que no se pronunció lo suficiente ante el riesgo del sector. A pesar de esto, los teatros – no todos, debido a que algunos han tenido que cerrar temporalmente e incluso definitivamente – han levantado el telón y han respetado todas las medidas de seguridad requeridas: distancia, mascarillas, geles hidroalcohólicos y aforos, a esto se le suma la baja interacción social que se produce en las salas de teatro. Los teatros son seguros y la cultura es segura. Esto se demuestra en el reciente informe presentado por el Ministerio de Sanidad, donde se confirma que el sector cultural solo ha producido un brote de los 8.488 detectados. Salvador Illa refuerza la seguridad en los espacios culturales haciendo constancia de que “la cultura es un sector que destaca como espacio seguro y ejemplar” y reconoce el esfuerzo realizado para evitar brotes. La Federación de Cines de España también se ha pronunciado ante dicho informe y recalca que “la incidencia de la Covid-19 en las actividades culturales es marginal, habiéndose producido tan solo un 0,01% de los brotes en espacios culturales, lo que supone que se han producido menos casos y brotes que en todos los demás ámbitos sociales como la hostelería, actividades deportivas u ocio nocturno”. Por tanto, es evidente que los espacios culturales son seguros.
Tras las demandas del sector, como las movilizaciones en 28 ciudades de España el 17 de septiembre convocadas por el movimiento Alerta Roja, en las que exigían medidas urgentes para actores, directores, técnicos, músicos, productores… El Ministerio de Cultura ha lanzado una campaña para incentivar que la cultura es segura y para animar a los ciudadanos a acudir “a todos los lugares en los que podemos vivir y disfrutar de la cultura in situ, con la tranquilidad de que son espacios seguros”, según José Manuel Rodríguez Uribes, ministro de Cultura y Deporte. El lema es #CulturaSegura y se divide en tres fases: la primera consistió en la difusión de vídeos de figuras representativas en la cultura en la cuenta de Instagram del Ministerio de Cultura; la segunda fue la presentación de la campaña en el madrileño cine Doré y en la tercera se invita a la industria a publicar sus propios contenidos mencionando el lema de #CulturaSegura.
En cuanto al proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2021, la cultura se ve más favorecida respecto del ejercicio anterior, con un incremento del 25,6%, destinando 1.140 millones de euros para el sector cultural. Las artes escénicas emplean 246 millones de euros, esta cantidad abarca “Teatro” con una dotación de 52 millones, el programa de “Danza y Música” con 108 millones y “Cinematografía” con 86 millones. El objetivo de este año girará en torno “al fomento de una oferta cultural de calidad; la protección de la actividad de artistas y creadores; el impulso de la internacionalización de la cultura española; la promoción del desarrollo del sector cultural; y contribuir a minimizar el impacto negativo de la Covid-19 en el tejido cultural”.
Situación en Cataluña
Actualmente, a pesar de todas las medidas de seguridad, la carencia de brotes y de la celebración en torno a la seguridad fehaciente de los espacios culturales; los teatros, salas de conciertos, cines y auditorios no podrán abrir sus puertas durante, al menos, 15 días. Estas restricciones se han anunciado en el Diari Oficial de la Generalitat. Sí pueden abrir con un 33% de aforo las salas de exposiciones, museos, archivos y galerías.
Tras conocerse la noticia se ha creado un revuelo de quejas y reflexiones en Twitter, como la del conocido actor, Miki Esparbé: “El vacío de quien se ha levantado sabiendo que la de ayer fue la última, de quien tenía la entrada comprada, del que no podrá abrir esta noche… La cultura es de las pocas cosas que ayudan a pasar mejor la angustia y la incertidumbre. Nos harán enloquecer y les importamos una mierda”.
Es incuestionable negar que estamos viviendo uno de los momentos más críticos de nuestra historia reciente. El estallido de la pandemia ha dejado latente la falsa fortaleza sobre la que se rige nuestro sistema. Atravesamos una época complicada que ayuda a reflexionar sobre nuestro comportamiento como especie, con el entorno y hacia dónde nos dirigimos como sociedad. Los oscuros meses de marzo y abril de este año parecen muy lejanos y distantes, pero si una cosa nos dejó clara la primera ola de la pandemia, fue que, aunque tuviéramos que cerrar las puertas de nuestras casas a familiares y amigos, la cultura acabó transformándose en un compañero imaginario que nos ayudaba a evadirnos de manera sanadora y segura. Desde Bambalinas queremos mandar todo nuestro apoyo a todo el sector cultural, y en especial al de Cataluña, así como animar a nuestros lectores a que acudan a los teatros y el resto de eventos culturales siempre que, con suerte, lo permitan las autoridades competentes.